Café Iruña, la leyenda que os espera en Pamplona

Muchos son los puntos de interés que os podréis encontrar en Pamplona, y más aún los lugares con encanto donde pasar la tarde acompañados de vuestros amigos y cercanos; pero a decir verdad, por mucho que busquéis arriba y abajo, difícil será que os encontréis con un lugar tan emblemático, céntrico y legendario como el Café Iruña, situado en plena Plaza del Castillo y en el corazón de los pamploneses desde 1888.
En sus más de cien años este clásico local de la vida pamplonesa ha pasado por historias de todo tipo, por momentos de alegría y jolgorio, y por miles de ocasiones únicas que han hecho crepitar las bisagras de su puerta principal para quedar dentro por siempre. Tantas son las bodas que en este lugar se han celebrado, tantas son las relaciones que sus paredes han sentido eclosionar desde un ligero susurro, y tantos son lo niños que aquí han visto pasar sus primeras celebraciones, que el alma de este céntrico café ha quedado impregnado en cada uno de los navarros, españoles y extranjeros que han tenido el orgullo de sentirse aquí como en su casa.
De hecho, el gran Ernest Hemingway, uno de los escritores más reconocidos del siglo XX, vivió entre las mesas del Café Iruña muchos de los momentos que dieron paso a sus grandes obras; ya que aquí, en compañía de sus más queridos y cercanos amigos, es donde dio rienda suelta a su imaginación. Por esa razón, y a modo de agradecimiento por su aportación a esta pequeña y hermosa ciudad, se decidió habilitar un contiguo al Iruña para dedicárselo enteramente; un lugar donde todo el mundo pudiera disfrutar en primera persona del ambiente que este maestro transmitía allí donde llegara. Claro está que podréis haceros fotos, algo que de hecho no hay momento del día en el que se deje de hacer.
En el Café Iruña podréis disfrutar con sosiego y una perdida absoluta de la noción del tiempo de un café como en pocos sitios hacen los grandes baristas, de una buena comida que podréis acompañar de un buen vino de la tierra, y claro está que de un amplio surtido de pintxos y productos de la región. Como no podía ser de otra manera, además de la carta, también tenéis la opción del menú del día, que además lo podréis tomar en la terraza del café. Y recordemos que todo ello en plena Plaza del Castillo, algo que le da un plus.
En el Café Iruña también tendréis la posibilidad de celebrar vuestros actos más emotivos, pues está preparado para dar la bienvenida a las fiestas que podáis organizar, a las bodas con las que siempre habéis soñado, a los bautizos que os iluminarán la vida, y en general a todo tipo de actos y reuniones. Los salones, ambientados con lámparas de época, grandes espejos, escudos policromados y exquisitas sillas Thonet, os darán la oportunidad de sentir que estáis en otro tiempo, de vivir una experiencia sin igual, y de querer volver una y otra vez. No siempre será para una boda, pero ahí estará su equipo de profesionales, que os recibirá nuevamente con los brazos abiertos.
Por cierto, si estáis planeando una fecha específica para vuestra visita, os recomendamos hacerlo en San Fermín; ya que el ambiente, si de por si es grandioso en la ciudad, en el Café Iruña se torna en algo que no olvidaréis jamás. Un pedazo de estas fiestas siempre vivirá en la esquina más querida del café, en la esquina de Ernest, el gran maestro.